2. Aprender a leer entre toma de notas

 

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Autores:

Eduardo Ochoa Hernández
Dina Durán Carranza
Nicolás Zamudio Hernández
Gladys Juárez Cisneros
Lizbeth Guadalupe Villalon Magallan
Pedro Gallegos Facio
Gerardo Sánchez Fernández
Rogelio Ochoa Barragán

 

 

Avatar: Newton

 

 


Si no puedes decirlo claramente, no lo entiendes tú mismo, menos podrás comunicarlo con eficiencia a alguien más. Escribir notas sobre algo, es pertinente, es ganar profundidad en nuestra lectura detrás de un manuscrito y sin conocimiento original previo. No debemos subestimar las ventajas de escribir notas para aprender a leer con más profundidad entre textos. La ventaja más importante de escribir es que nos ayuda a confrontarnos a nosotros mismos en cuanto a nuestros prejuicios, es decir, nuestras ideas que no tienen ni pizca de justificación en su origen mental.


La lectura, especialmente saltando entre textos (intertextual), puede engañarnos fácilmente si no estudiamos suficientemente el texto. La lectura es especialmente peligrosa debido al efecto de exponernos a ella sin el compromiso de investigar todo lo que en ella hay, desafía nuestra comprensión de palabras, sentencias, cláusulas y argumentos. En el momento que nuestro cerebro se familiariza con algo, nos hace creer que lo comprendemos como sistema de explicación (cuerpos de argumentos que explican, demuestran, calculan y categorizan). 


Si bien es obvio que la familiaridad no es comprensión, no tenemos ninguna posibilidad de saber si comprendemos algo o simplemente creemos que entendemos a algo hasta que nos ponemos a demostrar de alguna forma que nuestras ideas están justificadas con premisas sólidas. Si no tratamos de verificar nuestras premisas, nuestra comprensión será en realidad frívola y con la sensación de no ganar profundidad en el control mental del tema. El tiento de reformular argumentos tomando notas escritas, es una lucha única para darnos la oportunidad de crear para nuestra persona, ideas originales y mejorar nuestro desempeño intelectual, ya que, hacer lo contrario, hace que leer sea ineficaz. 


Comprender no solo es una cuestión previa al aprendizaje de algo. Hasta cierto punto, el aprendizaje es justificar nuestras ideas. Y el mecanismo de solo memorizar contenido nos solo es frustrante, sino contrario a la biología de nuestra cognición. Solo podemos mejorar nuestro aprendizaje, poniendo a prueba cotidiana la justificación de nuestras ideas a partir de encadenar premisas y recoger nueva información que flanquea nuestras ideas. Solo la escritura de piezas de texto en notas de investigación puede darnos objetividad, si hemos sido capaces de recuperar información y estructurarla dentro de un manuscrito para probar que hemos aprendido lo que leímos. 


Aprender en sí requiere asumir un método deliberadamente, nos referimos al aprendizaje serio y real que nos ayuda a aumentar nuestra comprensión del mundo, y no solo al aprendizaje que nos hace pasar un examen. Requiere compromiso y esfuerzo cotidiano de trabajar el sistema de toma de notas. Un profesor no está a nuestro alcance para hacer nuestro trabajo, esta allí evidentemente para apoyar con su propia experiencia y darnos cuenta de nuestros errores y sesgos inconscientes. El trabajo con método es lo que provoca el aprendizaje profundo, es difícil de creer, pero en educación esto es lo que distingue a las ideas revolucionarias en la pedagogía moderna[1]. 


Aprender requiere esfuerzo mental, porque tenemos que pensar en comprender y necesitamos recuperar activamente los viejos conocimientos, para que nuestro cerebro los conecte con la nueva información y nos hagamos de nuevas ideas. Para entender que tan importante es tomar notas al leer, recuerde cuánto esfuerzo el profesor pone para apoyar a nuestro entendimiento, él tiene que elaborar para su discurso en clases, una investigación previa que le de sustento a sus ideas. Intentar facilitar el aprendizaje de los estudiantes, es también permitirse que los estudiantes recreen su propio proceso de investigación y escritura de su discurso estructurado. Escribir notas, hace más fácil para el estudiante discutir con su profesor la configuración de la verdad y da la oportunidad a ambos de construir conexiones significativas para el conocimiento profundo de los temas. 


Cuando tratamos de responder a una pregunta, antes de saber como recuperar información y procesarla, es mucho más probable que tracemos en nuestro intento de aprendizaje sobre algún tema[2]. Si ponemos esfuerzo en leer y escribir notas en el intento de recuperar información, es mucho más probable que la recordemos por muy largo plazo, incluso si la recuperamos con ayuda, al final estaremos mejor con nosotros mismos[3]. Los datos empíricos son bastantes inequívocos en esta estrategia de aprendizaje, cuando un estudiante intenta estudiar sin tomar notas, siente que cada lectura es algo fallido en su intento de recuperarla para un examen[4]. 





[1] Doyle, Terry. 2008. Helping Students Learn in a Learner-Centered Environment: A Guide to Facilitating Learning in Higher Education. Sterling, Virginia: Stylus Publishing.

[2] Arnold, Kathleen M., and Kathleen B. McDermott. 2013. “Test-Potentiated Learning: Distinguishing between Direct and Indirect Effects of Tests.” Journal of Experimental Psychology: Learning, Memory, and Cognition 39 (3): 940–45.

[3] Jang, Yoonhee, John T. Wixted, Diane Pecher, René Zeelenberg, and David E. Huber. 2012. “Decomposing the Interaction Between Retention Interval and Study/ Test Practice: The Role of Retrievability.” The Quarterly Journal of Experimental Psychology 65 (5): 962–75.

[4] Dunlosky, John, Katherine A. Rawson, Elizabeth J. Marsh, Mitchell J. Nathan, and Daniel T. Willingham. 2013. “Improving Students’ Learning With Effective Learning Techniques Promising Directions From Cognitive and Educational Psychology.” Psychological Science in the Public Interest 14 (1): 4–58.